Ya iba tocando una recetita de las golosAnas, ¿verdad? Hay que descansar de lo mucho que os torturo con tantas tartas, cupcakes y magdalenas. Qué mala soy...
Pues eso es lo que hoy os traigo. Ea, para que no digáis.
Además es una receta deliciosa; tarta de zanahorias (carrot cake si sois fisnos) versión fitness.
Baja en grasas, baja en calorías, sin azúcar, con cantidad de proteínas y lo mejor de todo; está muy rica.
La tarta de zanahorias se ha convertido en una de mis favoritas pero claro, la versión gocha no es para diario, así que hay que buscar alternativas menos calóricas.
La receta original es de las chicas de Fit Happy Meals, a las que ya me habréis visto mencionar en otras ocasiones y cuyo blog no os podéis perder si queréis tener recetas para cuidarnos y que a la vez están muy ricas :)
¿Dónde consigo los ingredientes?
Igual algunos os suenan un poco raros o no los habéis visto nunca en el súper...
Pues tranquilos que en la sección "Recetas golosAnas" tenéis una descripción de qué son cada uno y dónde podéis encontrarlos :)
Ingredientes (para ocho raciones)
- 1 cucharadita de jengibre en polvo
- Edulcorante líquido
- 1 cucharadita de bicarbonato
- 150 gramos de zanahorias
- 1 cucharadita de canela molida (yo suelo ponerle más para un sabor más intenso)
- 1 clara de huevo (33 gramos aproximadamente)
- 16 gramos de almendra molida
- 100 gramos de harina de avena
- 12 gramos de levadura en polvo
- 9 gramos (1 cucharada) de aceite de oliva suave o de girasol
- 50 ml de leche desnatada
- 2 huevos L
Para la cobertura:
- 300 gramos de queso fresco batido desnatado o queso de untar bajo en grasas
- 40 gramos de proteína sabor vainilla (opcional) o aroma de vainilla
- Edulcorante ( mejor en polvo para que coja consistencia la crema o quedará muy líquida.)
Pelamos y rallamos la zanahoria y reservamos.
Ahora mezclamos por un lado los ingredientes secos: el jengibre, la canela, el bicarbonato, la almendra molida, la harina de avena y la levadura.
Por otro lado, mezclamos los ingredientes húmedos: la clara de huevo, la leche, los huevos, el edulcorante si lo usáis líquido y el aceite.
Incorporamos los ingredientes secos a los ingredientes húmedos, mezclando poco a poco.
Finalmente añadimos las zanahorias ralladas y comprobamos el sabor, si os gusta más fuerte podéis añadir más canela, más jengibre, más edulcorante...
Introducimos en el horno y horneamos durante unos 25-30 minutos o hasta que al pincharlo con un palillo salga limpio.
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| Mirad qué pinta..Pues mejor huele y sabe :D |
Dejamos enfriar y preparamos la crema.
Si usáis queso de untar desnatado no tenéis nada que hacer :P pero si usáis queso fresco batido, lo que hacemos para que quede más consistente es escurrirlo sobre un cuenco usando un paño limpio de cocina para que pierda un poco el líquido.
Batimos el queso con la proteína de vainilla (o el aroma de vainilla si no vais a usar proteína) y el edulcorante.
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| Tiene que quedar espesita para poderla untar, como una crema de queso de verdad. |
Yyy decoramos la tarta.
Como yo uso un molde pequeñito de unos 22 cm de diámetro, me sale bastante altita, así que puedo cortarla por la mitad para decorarla por enmedio.
Si usáis un molde más grande os saldrá más baja, lógicamente.
Y ya tenemos nuestra tarta fitness. Muy rica y nutritiva, para quitarnos el antojo de dulce sin culpabilidades a la par que nos cuidamos.
La zanahoria es verdura...Con lo que la tarta cuenta como una ración de ensalada ¿verdad?
Y por hoy esto es todo, no digáis que no pongo recetas interesantes ¿eh?
Pues a hacerla y a cuidarse sin sufrir, que la vida son dos días.
Nos vemos en la próxima receta...¿Qué será, será?
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